Los campeones del mundo durmieron poco. Casi nada. Las ojeras de los jugadores al embarcar ayer en el avión de Lufthansa rumbo a Berlín fueron prueba suficiente de que la Mannschaft había celebrado su cuarto titulo mundial como lo merecía: por todo lo alto. Schweinsteiger y compañía bailaron y cantaron en su hotel situado en la misma playa de Ipanema hasta el amanecer y no sólo contaron con la compañía de sus mujeres y novias, sino también de una verdadera estrella de la música internacional: Rihanna, fan número uno de la selección germana. La artista de Barbados subió todo tipo de fotos a su Twitter, incluso una con Schweini y Podolski besándola en la mejilla. “Aún no nos hemos dado cuenta de lo que hemos conseguido”, dijo Thomas Müller antes de comenzar la fiesta a la que también asistieron el presidente de la UEFA, Michel Platini, y el presidente del COI, Thomas Bach.
Está previsto que el avión de los campeones aterrice hoy a las 9 de la mañana en el aeropuerto de Berlín-Tegel, desde donde la expedición teutona se dirigirá a una fan zone situada en el centro de la ciudad, entre la puerta de Brandenburgo y la Columna Triunfal. Se espera que asistan cerca de un millón de personas al acto de celebración que también incluirá el recibimiento del equipo por parte de Klaus Wowereit, alcalde de Berlín, y la entrada en el libro dorado de la capital alemana.
Jerome Boateng, jugador del Bayern Múnich nacido en Berlín, se mostró muy emocionado al conocerse la noticia de que la Mannschaft iba a celebrar el título en la capital. “Es algo único para mí que todo esto se lleve a cabo en mi ciudad de nacimiento, estamos contentísimos de traer la Copa a casa y lo celebraremos con los alemanes hasta que no podamos más”, declaró. A partir de ahí, cada uno de los jugadores volverá a su casa o se irá directamente de vacaciones para descansar dos semanas antes de volver al trabajo con sus respectivos clubes.(Fuente)
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