El central de 22 años juega en el Wolfsburgo áunque ha estado cedido esta temporada en la Roma de Luis Enrique. Podría ser el refuerzo para la zaga del club andaluz
Desde la marcha de Kris Stadsgaard, Manuel Pellegrini sólo ha contado con tres centrales. Demichelis, Mathijsen y Weligton. El trío tendrá continuidad, pero necesita un efectivo más que dé solidez a la zaga. A dos semanas de la pretemporada y a la espera del retorno de Ghubn, otro danés coincide perfectamente con la horma que ha diseñado el Málaga para peinar el mercado: Simon Kjaer.
El Wolfsburgo tiene la última palabra. Aunque el regreso de la promesa danesa de 22 años al Calcio no ha sido todo lo bueno que se esperaba, Luis Enrique ha tenido a sus órdenes a un jugador que funciona en el juego aéreo, es rápido y sabe jugar la pelota.
Kjaer está aún en periodo de crecimiento, ha jugado en Italia y Alemania y ha sido indiscutible en su selección para esta Euro. Además, su coste no puede ser desorbitado. Complicados parámetros que exige el Málaga.
Los andaluces quieren un jugador que se amolde al concepto que tiene otro central que es el que ahora mueve los hilos: Manuel Pellegrini.
Un zaguero con cualidades físicas que permitan manejarse por alto, ir al choque y sacar el balón jugado sin problemas. Un mirlo blanco, similar al Kjaer por el que el Wolfsburgo pagó 15 millones hace dos años después de que el danés jugara un par de temporadas en el Palermo y fuese al Mundial de Suráfrica.
El club alemán no cuenta con él y si puede aligerar su pesada ficha -le restan dos años-, lo hará. El problema es que la Roma no ha ejercido la opción de compra de 7 millones de euros que se contemplaba en su cesión. Ahora deberá de escuchar las ofertas que el jugador tiene sobre la mesa.(Fuente)
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