El Manchester United está como loco para reforzarse. Su primer objetivo era Cesc, pero se ha encontrado con el 'no' rotundo del Barça y del jugador. Luego ha ido a por Bale, pero el galés no que quiere ir a Manchester.
Ahora, ha puesto sus ojos en el Real Madrid, concretamente en Ozil y Kaká. Sí, el club de la Premier podría poner encima de la mesa hasta 55 millones de euros por los dos jugadores.
El alemán no está por irse del Madrid, pero si llega Bale ya no sería un fijo y eso podría hacer cambiar la situación, como con Di María, que también se iría en cuanto Bale fichara por el Real. En el caso del brasileño, el club blanco estaría encantado de venderlo, pero es Kaká el que no quiere marcharse de Chamartín.
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